El jueves esta algo nerviosa y ansiosa por ir a la revisión de mi pie, si todo había marchado bien, si había cuidado como se debía mi pie, me podría quitar la férula y podría caminar normalmente, en realidad ya me la quería quitar porque de cierta forma me preocupaba mi presentación de taller, me había causado mucha ilusión y el que exista una posibilidad de que no lo pueda realizar me entristecía bastante, por otro lado estaba la coreografía de zombies para el concurso que nos tomarían a mis compañeros y a mi como proyecto de inglés.
Me habían puesto a cargo el armar las coreografías para que se las enseñara pero entre todas las cosas que me habían estado pasando deje de ponerle la atención e importancia que se debía y lo deje en el olvido. Sentía que los estaba defraudando pero por mas que intentaba ponerme las pilas con eso, salían circunstancias que me lo impedían.
Un día unas compañeras decidieron poner algunos pasos, ya nos quedaban mucho tiempo y yo a penas estaba organizándome como antes, mi amiga Jessica y yo, se suponía estaríamos a cargo y cuando ellas tomaron de cierta forma las riendas de la situación, sentimos que se estaban apoderando de nuestro "puesto" en cierto punto fue algo favorable, si no lo hubieran hecho hubiéramos tardado más en tener un avance, pero empezaban a dejar a un lado nuestras opiniones sobre la coreografía, que en si, era nuestra y eso nos hizo enojar un poco.
Creo que esto hizo que por fin me reorganizara para hacer las rutinas, me tarde, pensando en algo que fuera del agrado de todos y tuve que pedirle ayuda a mi primo, me ayudo a organizar mis ideas vagas para formar algo exitoso.
Llegue ilusionada a la escuela para mostrarles mi trabajo, ellas no parecían muy convencidas, se notaba que querían seguir al mando, pero sus ideas a mi parecer no eran muy convincentes, las demás estuvieron de acuerdo conmigo, ya que el tiempo se nos iba y lo mejor era aceptar eso a tardarnos más en armar otra alternativa.
Nos faltaba una rutina muy famosa, pero que igual nadie tenia una idea concreta, de nuevo decidí buscarla y aprendérmela para después mostrársela, con trabas por los cuidados de mi pie lo logré.
Mi pie mejoraba y el doctor me había indicado que solo el fin de semana dejara reposar mi pie, para poder bailar, esto me emociono e hizo que me llenará de ganas por avanzar con lo del concurso.
El concurso, será el martes y hay miles de detalles que pulir pero estoy segura que con ganas de hacerlo y mucha dedicación lo lograremos, tal vez y no seamos los mejores pero sin duda, a pesar de todo nos divertimos con esto, y aprendimos, al menos yo, que hay que trabajar en equipo, en conjunto las cosas salen mejor y si deciden ponerte al mando de algo,
hay que tomar muy en serio ese papel.
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